Durante las últimas entradas en nuestro blog hemos tratado de aportar nuevos consejos sobre una higiene bucodental completa. Hoy nos toca dedicar el post al uso del hilo dental.

El hilo dental está compuesto por un conjunto de finos filamentos de nailon o plástico muy útil para retirar los restos de comida que se quedan entre nuestros dientes y que deriva en placa dental.

Debe usarse con cada cepillado, antes o después de él, es el mejor complemento para contribuir a una higiene completa.

Para un uso adecuado de hilo dental se deben seguir estos pasos:

1. Cortamos un trozo de unos 45 centímetros y lo enrollamos en los dedos anulares de ambas manos, dejando libres unos 4 o 5 centímetros para realizar la limpieza.
2. Sosteniendo el hilo tirante con los dedos pulgares e índices deslizamos el hilo entre los dientes con movimientos suaves, para evitar rozar las encías.
3. Cuando alcanzamos la zona de la encía, el hilo debe rodearla formado una “c” para limpiar sin dañar la misma.
4. Repetir este movimiento por cada zona interdental de todas nuestras piezas dentales, para asegurar la eliminación de cualquier resto.

Si repites esta limpieza al menos una vez al día te asegurarás no solo la eliminación de restos de alimentos, además, la disminución de bacterias que se localizan en la boca. Evitando la caries y el posible daño que la placa puede causar a los huesos que sustentan tu boca.

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