Como sabéis, hay muchas personas que deciden blanquear sus dientes de forma casera en vez de recurrir a los tratamientos. Para ello, se sirven del bicarbonato de sodio, sin embargo, su uso no está exento de riesgos y es importante conocerlos antes de decidir utilizarlo como blanqueador dental. Hoy, desde Clínica Dental Vallespir, os hablamos de ello para que sepáis más sobre el asunto.
Bicarbonato cómo blanqueador: Qué riesgos conlleva
En primer lugar, es importante destacar que el bicarbonato de sodio es un abrasivo, lo que significa que puede dañar el esmalte dental si se usa en exceso o de forma incorrecta. Si se utiliza con demasiada frecuencia, puede debilitar el esmalte dental y aumentar el riesgo de caries y sensibilidad dental.
Además, el bicarbonato de sodio no elimina las manchas de los dientes, sino que simplemente las oculta de forma temporal. Esto se debe a que el bicarbonato de sodio no contiene agentes blanqueadores como los que se encuentran en los productos de blanqueamiento dental, por lo que no es efectivo para eliminar manchas persistentes.
Por otro lado, el uso excesivo de bicarbonato de sodio también puede provocar irritación de las encías y la boca, lo que puede ser muy incómodo y doloroso.
Por ello os recomendamos que, si queréis tener una sonrisa más blanca, pidáis vuestra cita con nosotros para que podamos ayudaros con el proceso.