Cuando nos realizamos un tratamiento de blanqueamiento dental es importante seguir una serie de pautas para mantenerlo por más tiempo. Sin embargo, este mantenimiento dependerá de las características de cada persona y de sus hábitos de vida:
- Evitar alimentos o bebidas que puedan teñir el diente: Hay diferentes alimentos como las fresas, los arándanos o los dulces que pueden producir manchas en el esmalte, ya que los colores son absorbidos por el diente. También, bebidas como el vino tinto, el té o el café pueden teñir nuestros dientes.
- No fumar: El tabaco es uno de los principales agentes causantes de las manchas en los dientes, por lo que si te has realizado un blanqueamiento por que eres fumador, es aconsejable que abandones este hábito, ya que con el tiempo volverán a manchar tus dientes.
- Mantener una buena higiene bucodental: Debemos lavarnos los dientes tras cada comida y siempre antes de irnos a dormir. A la hora de escoger el dentífrico y el colutorio bucodental mira bien entre sus ingredientes para que no lleven colorantes.
- Realizar revisiones periódicas: Después del blanqueamiento dental es normal sentir cierta sensibilidad, por lo que es importante realizar revisiones dentales unas semanas después del tratamiento para asegurarnos de que la sensibilidad ha desaparecido.