Los nódulos de Bohn son pequeñas protuberancias blancas o amarillentas que aparecen en las encías o en el paladar de los recién nacidos. Estas pequeñas acumulaciones, también conocidas como quistes gingivales, son bastante comunes y suelen preocupar a los padres cuando las notan por primera vez. Afortunadamente, los nódulos de Bohn no son dañinos y, en la mayoría de los casos, desaparecen por sí solos sin necesidad de tratamiento. Hoy, desde Clínica Dental Vallespir, os hablamos de ellos.
Nódulos de Bohn: ¿Qué son y cómo se tratan?
¿Qué los causa?
Los nódulos de Bohn están formados por restos de tejido epitelial atrapado durante el desarrollo del bebé. Estos quistes no están asociados a ninguna enfermedad ni condición grave y no causan dolor o malestar en el bebé. Son similares a otras formaciones comunes en los recién nacidos, como las perlas de Epstein, que se localizan en la parte superior del paladar.
Tratamiento de los nódulos de Bohn
En la mayoría de los casos, los nódulos de Bohn no requieren tratamiento, ya que tienden a desaparecer espontáneamente durante las primeras semanas o meses de vida del bebé. Simplemente se reabsorben sin dejar secuelas o causar problemas de salud. No es necesario aplicar ningún tipo de crema o tratamiento médico en el área.
Es importante que los padres eviten manipular o presionar los nódulos para prevenir infecciones. Si tienes alguna duda o los nódulos persisten más tiempo del esperado, lo ideal es consultar al pediatra para obtener orientación y tranquilidad.