Existen diferentes técnicas para blanquear nuestro esmalte dental. Dependiendo de las necesidades de casa paciente y el tono de sus dientes se aplicará una técnica u otra:
- Peróxido de carbamida. Este tratamiento se realiza desde casa gracias al uso de férulas realizadas por el dentista y a las que se añade un líquido (peróxido). Cuando el paciente se va a dormir, se coloca las férulas, que ha de llevar toda la noche durante dos o tres semanas.
- Luz halógena. En este caso, el tratamiento se realiza en la clínica dental con un líquido de peróxido de hidrógeno que, mediante la aplicación de una luz con lámparas halógenas, produce una reacción química, denominada oxidación, que consigue devolver su color natural a los dientes. Por lo general, se realizan de dos a tres sesiones de una hora, aunque una reciente variación, que consiste en el uso de lámparas de plasma, consigue el blanqueamiento de las dos arcadas en apenas cuarenta minutos.
- Láser. Es el sistema más rápido, similar al anterior, con el que se consiguen resultados en una única sesión, que suele durar algo menos de tres horas. En este caso, el proceso de oxigenación se acelera con el efecto del láser, que elimina las manchas de la estructura del diente.
Si quieres realizarte un blanqueamiento dental, no dudes en visitar nuestra consulta y preguntarnos sin compromiso. ¡Te esperamos!